... como Penélope con su interminable labor, mi protagonista lo intenta una y otra vez... todo lo que avanza con la mejor de su disposición lo deshace la corriente, que le devuelve irremediablemente a la costa.
¿realmente merece la pena seguir intentándolo?
Ya no se trata de tener más o menos fuerzas......a estas alturas de la aventura lo que crece es la desgana que cada día que pasa se hace más y más grande.
Quién sabe si algún día.....
Llegados a este punto, en el que no parece encontrarse ninguna solución, abandono a mi actor a su suerte, no es menester seguir hurgando en la herida, quizá.......con el paso del tiempo regrese a comprobar cuál ha sido el fin de su particular y peculiar batalla. Personalmente deseo que su esfuerzo se vea recompensado algún día........espero que cuando eche la vista atrás y haga balance...................haya merecido la pena.
¡Hasta siempre!
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